El aceite de oliva virgen extra (AOVE) ha sido utilizado como alimento y remedio natural durante siglos. Sus beneficios para la salud son reconocidos en todo el mundo.
Recientemente, ha habido estudios que sugieren que el AOVE podría tener propiedades anticancerígenas y puede ser utilizado como una herramienta valiosa en la prevención y tratamiento del cáncer de mama y colorrectal. Descubre más.
Por qué el AOVE es un buen aliado contra el cáncer
El cáncer se desarrolla cuando las células anormales crecen de manera descontrolada y forman tumores. Esto puede ser causado por una combinación de factores genéticos y ambientales, como la edad, la exposición a sustancias tóxicas, la dieta y el estilo de vida.
El aceite de oliva virgen extra es especial para la prevención del cáncer debido a su rica composición de antioxidantes y ácidos grasos insaturados, incluyendo ácido oleico, polifenoles y tocoferoles. Estos han demostrado tener propiedades anti-inflamatorias y antioxidantes que podrían ayudar a prevenir el daño celular y el desarrollo del cáncer.
Además, los polifenoles presentes en el AOVE han demostrado que pueden inhibir la proliferación de las células tumorales, algo que podría ser de gran utilidad para el tratamiento del cáncer.
Efectos del aceite de oliva virgen extra en el cáncer de mama
Hay evidencia que sugiere que el aceite de oliva virgen extra (AOVE) podría tener un efecto positivo en la prevención y tratamiento del cáncer de mama, según lo afirma un estudio publicado por la prestigiosa revista médica European Journal of Clinical Nutrition.
Lo que más sorprende de los resultados obtenidos por este estudio es que el consumo de aceite de oliva virgen extra para freír, sazonar o cocinar, combinado de dos cucharadas en crudo, por ejemplo, para aliñar ensalada, reduce hasta en un 28% el riesgo de contraer cáncer de mama.
No hay una sola dieta o alimento que pueda prevenir el cáncer de mama, pero se ha demostrado que una dieta saludable y equilibrada puede ayudar a reducir el riesgo. Existen algunos alimentos, junto con el AOVE, que destacan por sus propiedades preventivas frente al cáncer de mama:
- Legumbres. Son una buena fuente de proteínas, fibra y compuestos antiinflamatorios que podrían ayudar a prevenir el cáncer. Además, las legumbres son una alternativa saludable a las carnes rojas, que han sido relacionadas con un aumento del riesgo de cáncer.
- Frutos secos. Aportan vitamina B6 y ácido fólico, lo que según determinados estudios estos nutrientes reducen las posibilidades de sufrir cáncer de mamá, especialmente tras pasar la menopausia. Además, los expertos aseguran que tomar 25 gr de nueces disminuye las posibilidades de manera considerable.
- Yogures. Los yogures y la leche fermentada son alimentos ricos en probióticos que ayudan a ralentizar la proliferación de células tumorales.
- Manzanas. ¿Sabías que una manzana al día reduce la probabilidad de desarrollar cáncer de mama gracias a sus polifenoles? Esta es la fruta más rica en estas sustancias. Eso sí, es recomendable comerla con la piel, ya que es donde se concentra la mayor parte de polifenoles.
En definitiva, como demuestran los recientes estudios, los beneficios del uso de AOVE para contra el cáncer de mama son numerosos. Y tú, ¿ya incluyes el consumo diario recomendado de aceite de oliva virgen extra en tu dieta?